Por Germán Romano

Diversos medios de comunicación, Clarin, Infobae y Tiempo Argentino, publicaron recientemente notas sobre la realización de vasectomías en Argentina. En todos los casos hay un denominador común, el mantenimiento y sostenimiento del mandato de la procreación. En todos los ejemplos, los varones heterosexuales que se realizaron la intervención exponen que luego de procrear decidieron no continuar haciéndolo. Obviamente que no es lo mismo el machismo implícito de un varón en la exigencia que el método de anticoncepción sea algo que solo atañe a las mujeres, así como tampoco se plantea la opción de la no procreación cuando se trata de los varones.

En el caso del medio Clarin, la información respecto al incremento de vasectomías pareciera mostrar que hay un avance importante respecto a la determinación de los varones en asumir nuestra responsabilidad en la no concepción. Informan que las vasectomías crecieron un 50% en 2 años. Este dato parecería ser alentador respecto al cuestionamiento de nuestros privilegios, pero el porcentaje calculado a nivel nacional es sobre un total de 121 intervenciones en el año 2015 a 180 en el año 2017. Entre los años 2016 a 2017 se pasó de 143 vasectomías a 180, es decir un incremento del 25%. No obstante, en el caso de la Ciudad de Buenos Aires, para citar un ejemplo, la cantidad de tubectomías o ligaduras de trompas se incrementó un 30% en el mismo periodo. Asimismo, la cantidad de ligaduras de trompas que se realizan frente a las vasectomías es entre 40 o 100 veces mayor, dependiendo de la región que se analice.

No en todos los países del mundo la relación es similar, ejemplo de ello, donde las intervenciones quirúrgicas de anticoncepción en varones supera a las de mujeres son:

Vasectomía / Tubectomía

  1. Canadá:22% / 11%
  2. Reino Unido:21% / 8%
  3. Nueva Zelanda:19,5% / 14,6%
  4. Bután:12,6% / 7,1%
  5. Países Bajos:7% / 3%

Fuente: ONU (Organización de Naciones Unidas)

En la nota anteriormente mencionada de este mismo medio, consultan a Alberto Layus, médico del servicio de urología del Hospital Italiano, hace referencia a una vasectomía novedosa sin bisturí. Algo sobre lo cual ya hemos publicado en Virginia Bolten. En Argentina, las vasectomías se realizan con anestesia general y a través de una incisión con el uso de bisturí. Desde el año 1973, que está la posibilidad de realizar vasectomías sin bisturí, fue desarrollada por Li Shunqiang, del Instituto Chongqing de investigación Científica en Planeamiento Familiar de China y en 1985 en EE.UU. se realizó la primera intervención de este tipo.

 

IMAGEN: Tiempo Argentino

El periódico Tiempo Argentino, publicó el 16 de agosto una nota titulada, No me corten los huevos. La imagen que acompaña la nota y el título es más que elocuente.

El artículo plantea como opción un gel ensayado en 2010 en monos y conejos, pero que aún no se encuentra disponible para varones.  No se informa en la nota que hubo una pastilla anticonceptiva que si se ensayó en varones pero que no pasó las pruebas. La revista Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism publicó, a principios de 2017, los resultados de un ensayo de anticonceptivos inyectables para varones cis*. El resultado arrojó una eficacia del 96%. La Organización Mundial de la Salud expresó “El estudio descubrió que es posible tener un anticonceptivo hormonal para hombres que reduzca los embarazos no planeados en la pareja del hombre que la use”.

Sin embargo, el ensayo se detuvo ya que en una tasa menor al 10% de los varones que participaron tuvieron efectos secundarios. Estos fueron, depresión, dolor muscular, cambios de ánimo, acné y alteraciones en la libido. Los mismos, son similares a las pastillas para mujeres cis del día después.

En la nota mencionada también se expresa sobre la irreversibilidad de la intervención. La vasectomía puede ser reversible, esto estará dado en función del tiempo transcurrido desde la intervención y la singularidad de cada cuerpo. Según un trabajo del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, solo el 4% de los varones cis a los cuales se les realizó una vasectomía solicitan su reversión.

¿Qué es la vasectomía?

La opción al no haber pastillas anticonceptivas es la ligadura de los conductos deferentes o vasectomía. La vasectomía — una intervención ambulatoria— consiste en ligar los conductos que unen la uretra con os testículos, que es donde se generan los espermatozoides. La eyaculación de un varón cis no vasectomizado está compuesta en un 95% por semen generado en la próstata y por un 5% de espermatozoides generados en los testículos. La vasectomía no implica disminución del deseo sexual, ya que la próstata continúa su funcionamiento normalmente, lo que difiere es que la eyaculación no tendrá espermatozoides. Para confirmar la eficacia de la vasectomía es fundamental efectuarse luego de 20 eyaculaciones o 3 meses de la realización de la intervención un espermograma, en caso que el resultado sea 0, se confirma la eficacia.

La vasectomía en la Argentina está garantizada por la ley 26130 del año 2006. En la misma se establece que para realizarse esta cirugía es necesario tener 18 años o más y recibir información sobre este y otros métodos anticonceptivos. Es una decisión personal y no hace falta autorización o entrevista con la pareja. Tampoco es requisito haber tenido hijas/os. Se realiza en forma gratuita en hospitales públicos, obras sociales y prepagas.

(*) Es un término que se utiliza para describir personas cuya identidad de género y género asignado al nacer coinciden, es decir, que no se identifican como transgénero.