Guillermo Martinez

Trump y Netanyahu

La primera visita internacional del presidente electo en la democracia semidirecta de EE.UU. Donald Trump, fue a Arabia Saudí. Visita inédita, ya que durante los 44 gobiernos anteriores elegidos para conducir los designios de quienes habitan EE.UU., jamás se había optado por Arabia Saudí como destino para inaugurar la agenda oficial de viajes presidenciales. Cabe destacar que las primeras felicitaciones a Trump por su triunfo electoral fueron las de Netanyahu y Marine Le Pen de la extrema derecha francesa. El vicepresidente elegido por Trump fue Mike Pence, quien se define asimismo como “cristiano, conservador y republicano, en ese orden”. Pence, partidario del movimiento Tea Party, es el vínculo del gobierno de EE.UU. con el sector evangélico.

De los 50 principales medios de comunicación en EE.UU., solo uno apoyó explícitamente la campaña de Donald Trump, Las Vegas Review Journal. No es casual que el dueño de este periódico sea Sheldon Adelson, quien tiene el rotativo de mayor tirada en Israel. Asimismo Adelson, como ya informamos desde Virginia Bolten, es el mayor accionista del fondo buitre NHL de Paul Singer. Este fondo fue favorecido por el pago de intereses y capital impago de Argentina luego del triunfo de la alianza CAMBIEMOS. El periódico gratuito de Adelson ha sido acusado de posición hegemónica, el diario israelí Hareetz informó que en los últimos años, este perdió más de 200 millones de dólares. A pesar de haber existido intentos legislativos para modificar la posición del medio Israel Hayom, los proyectos no avanzaron.

Recientemente al primer ministro de Israel, se le solicitó desde un juzgado que informe la  frecuencia de sus comunicaciones con Adelson por un posible vínculo de corrupción entre ambos. Entre 2012 y 2015, Netanyahu tuvo más de 200 comunicaciones con el editor de Israel Hayom, Amor Reguev. La mayor manifestación en Tel Aviv de los últimos años se dio luego de las acusaciones por corrupción contra el primer ministro israelí para exigir su renuncia. Una semana posterior a esta marcha, Trump anunció el traslado de la embajada de EE.UU. a Al Quds (Jerusalén).

Bolsonaro y Netanyahu

Una de las primeras entrevistas que brindó el presidente recientemente  electo de Brasil Jair Bolsonaro, fue al periódico Israel Hayom. En declaraciones a este medio expresó, “Israel es un Estado soberano. Si ustedes deciden cuál es su capital, nosotros les seguiremos. Cuando me preguntaron durante la campaña si trasladaría la embajada si fuera elegido presidente, contesté sí”. Sobre la representación diplomática de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en Brasil, este amenazó “Palestina primero tiene que ser un país para tener derecho a una embajada”. La política exterior de Bolsonaro atenta contra el estatus internacional de Al Quds (Jerusalén) y sigue la misma línea que Donald Trump. Las consecuencias del nuevo orden internacional fueron más de 170 palestinas y palestinos asesinados en menos de un año.

Familia Saud y Netanyahu

Los vínculos militares entre Arabia Saudí e Israel ya dejaron de encontrarse en las sombras de la confidencialidad de sus gobiernos. No obstante, la cooperación entre ambos es explícita y notoria durante estos últimos años.Christopher Cramer, un ciudadano estadunidense contratista en Arabia Saudí murió en 2015 en extrañas circunstancias Cramer trabajaba para la empresa  Kollsman Inc., con sede en Merrimack, filial de Elbit Systems (ESLT) quien fabrica armas sofisticadas y electrónica militar. La policía saudí informó que Cramer se había suicidado tirándose al vacío en la ciudad de Tabuk, la familia que estaba en contacto permanente, afirma que fue asesinado. El abogado y amigo de la familia Noha Mandell, detalló que Cramer viajó a Arabia Saudí para resolver “un problema con el cliente”, haciendo referencia a la venta de misiles TOW de fabricación israelí a una empresa privada saudí.

El asesinato del periodista saudí con residencia en EE.UU. Jamal Khashoggi por parte de los servicios secretos de Arabia Saudí tuvo fuertes repercusiones internacionales. El miembro asesinado era miembro de la élite del país árabe pero crítico con la conducción de la familia Saúd. A pesar de la presión internacional contra el reino por el asesinato, Netanyahu guardó un profundo silencio y luego de un mes sus primeras declaraciones fueron que se debía mantener la “estabilidad” en Arabia Saudí. Además del frente político regional común entre Israel y el Reino sus vínculos comerciales se incrementan año a año, este último ha adquirido en el 2018 material de inteligencia israelí por U$S250millones. El país árabe asimismo, no hizo ninguna queja formal por la masacre diaria contra el pueblo palestino en los últimos meses.

Netanyahu, Trump, Bolsonaro, Saúd y el evangelismo

Imagen: Encuentro en A.Saudí – Reuters

Un nítido ejemplo sobre las conexiones entre estos cuatro gobiernos, es su vínculo con el evangelismo, algo expuesto previamente en Virginia Bolten. Una reunión que hubiera sido impensada tiempo atrás se dió el 1 de noviembre entre evangelistas de los EE.UU. y el príncipe Mohammed bin Salman en el reino saudí. Sobre esta reunión el portavoz del grupo evangelista Moore expresó: “El Reino de Arabia Saudita se encuentra entre las naciones más ricas, más poderosas y más importantes de Medio Oriente, en toda la historia”, asimismo continuó: “También tiene una enorme influencia en la teología islámica que se enseña en todo el mundo. Si bien el Reino es restrictivo y controvertido en varios aspectos serios, bajo el Príncipe Heredero comenzó a reformarse y profesó el deseo de cambiar de manera profunda. Precisamente por estas razones, pensamos que era prudente aceptar la invitación que recibimos del Reino, emitida hace más de dos meses, para venir como evangélicos a participar en un diálogo”.